1. Pensar que el color de la piel hace mejores a unos que a otros. Es penoso, triste, humillante que haya seres humanos que crean esto, pero la discriminación étnica continúa siendo una cruda realidad.
2. Creer que un ser humano vale más porque usa ropa de marca. Aunque parezca mentira, ¡hay gente que se lo cree!
3. Estar convencido que "hombre" es sinónimo de humanidad. Hay quien cree que un varón tiene más derechos que una mujer, que está autorizado a tener más aventuras que su esposa.
4. Pensar que los pobres son pobres porque quieren. Y lo dicen convencidos, seguramente porque quien lo dice no es pobre.
5. Vanagloriarse de saltar las reglas. Si bien la ley es la más grande obra civilizatoria de la especie humana, para ser un buen -o buena- imbécil hay que sentirse orgulloso de poder saltar el sistema normativo. En otros términos: pasar un semáforo en rojo, no pagar impuestos, hacer trampa cada vez que se pueda.
6. Creer que los varones siempre tienen ganas de sexo. En general esto lo dicen básicamente los varones; las mujeres, en todo caso, no lo desdicen aunque en privado puedan cuestionarlo, o reírse. Pero toda la cultura se construyó sobre ese mito, y se mantiene.
7. Actuar a partir de prejuicios. No se puede ser un buen imbécil si no se dispone de una buena dotación de prejuicios. Tener una buena explicación prejuiciosa para cada cosa ahorra el duro trabajo de pensar por sí mismo.
8. Dejarse llevar por la corriente, repetir lo que hay que repetir. Claro que esto, sin dudas, ahorra problemas. Para ser un buen imbécil no hay que cuestionar nada.
9. Estar convencido que ser "ganador" es tener una actitud viril y de desprecio sobre el otro. Dicho sencillamente, relacionarnos bajo un patrón varonil, guerrerista, destructivo, y a partir de él, montar toda una cultura. Este es el modelo con el que hemos ido construyendo la historia.
10. Admirar y aspirar a repetir el modelo de "ganador". Nos seduce estar en la cúspide, tener esa sensación de sentirse "más que otro". El poder es eso. Y lo más común es aspirar a tenerlo.
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